domingo, 25 de septiembre de 2011

Algunos arquitectos se empeñan en tratar de imponer la arquitectura "moderna" en el Centro Histórico de Málaga, aunque ello implique necesariamente la demolición previa de las edificaciones centenarias preexistentes.

Para poder construir nueva arquitectura "moderna" en el Centro Histórico de Málaga es imprescindible demoler, derribar, destruir previamente el Patrimonio Histórico representado por hermosos edificios centenarios.



Publica hoy el Diario La Opinión de Málaga una entrevista al arquitecto Francisco Javier Boned, entre otros "méritos" autor del libro "Málaga: el oficio de la arquitectura moderna (1968-2010)", en el que, como ya denunciamos en su momento en este blog algunos arquitectos sinvergüenzas revelan toda su podredumbre interior y se atreven a calificar de cochambre el Patrimonio Histórico del Centro de Málaga.
Entre otras cuestiones en la referida entrevista al Sr. Boned, se tratan temas recurrentes en el "mundillo" de los arquitectos sin escrúpulos (por suerte también en Málaga hay un mundillo de arquitectos muy honestos, dignos y respetables) como son las polémicas de Stella Maris en particular y la arquitectura "moderna" en general, y aprovechamos desde aquí para recordarle al Sr. Boned que si el estilo arquitectónico de la Iglesia de Stella Maris gusta o no es una cuestión estética y, por tanto, subjetiva. El primer problema de este edificio es que se inserta de forma brutal en el BIC Conjunto Histórico Artístico de Málaga, previa destrucción por demolición de un precioso palacete barroco con más de doscientos años. En segundo lugar, sí puede analizarse la cuestión estética, y resulta que existe una Ley de Patrimonio Andaluz y Español, y un Plan (PEPRI), que protegen la zona histórica de este tipo de actuaciones “vanguardistas”.
Sobre la cuestión del rechazo que supuestamente provoca la arquitectura “moderna” en Málaga resulta curioso comprobar cómo una y otra vez los arquitectos ocultan en el debate un elemento informativo esencial, y es que ese rechazo no se produce en el 99% del territorio urbano de la ciudad de Málaga, sino casi exclusivamente en el Centro Histórico, insistimos, declarado BIC y con un Ley marco normativo protector, entre otras cosas, precisamente de la imprescindible demolición de edificios centenarios que conlleva necesariamente la construcción de nuevas edificaciones.
El núcleo del Centro Histórico de Málaga representa el 0,65% del total de suelo urbano del término municipal de Málaga... algunos arquitectos dicen sentirse ofendidos porque no les dejan construir sus "vanguardistas" obras dentro  de estas 40 hectáreas. ¿ES QUE NO LES BASTA CON LOS SESENTA MILLONES DE METROS CUADRADOS de suelo urbano disponible fuera del Centro Histórico de Málaga? Hay que ser sinvergüenza y caradura para usar este tipo de argumentos para defender lo indefendible y, además, contrario a la LEY vigente.
Así pues, de nuevo el principal rechazo se produce por la destrucción de elementos patrimoniales históricos. ¿Por qué ese afán de tener que destruir en el minúsculo sector que representa el Centro Histórico si en el resto de la ciudad existen miles de hectáreas donde construir esa supuestamente anhelada arquitectura de “vanguardia”? 
Prácticamente todos entienden, y defienden, la existencia de Reservas Naturales en las que está prohibido alterar nada... incluso los pájaros más pequeños o los arbustos menos "icónicos" están protegidos y nadie lo pone en duda... ¿Entonces, por qué es tan difícil asumir y respetar que existe una Reserva Patrimonial Histórica en el centro de Málaga? Y recordemos que una Reserva Natural es un lugar vivo, dinámico, al igual que un Centro Histórico, porque aquí nadie habla de "congelar" el tiempo sino solo de ser respetuosos con el legado material que nuestros antepasados se esforzaron en construir y que nosotros destruimos de forma preocupantemente acelerada, ya que solo en esta última década, se han demolido unas 250 edificaciones históricas solo dentro de la "Almendra" Histórica, y a este ritmo, en muy poco tiempo ya no quedará nada que proteger porque políticos, promotores y arquitectos lo habrán demolido, derribado, destruido absolutamente todo, salvo un escaso 5 ó 10% (Catedral, Alcazaba, Teatro Romano, etc.). Recomendamos la lectura del post Geografías del Desastre donde estas cifras son perfectamente argumentadas y demostradas.
Y para concluir este post, resulta muy procedente destacar las desafortunadas palabras del Sr. Boned en lo referente al proyecto de hotel del ma-Moneo, pues decir que es un proyecto fantástico, que busca la integración paisajística (¿con qué? ¿con la arquitecto-defecación de los años 1960 que hay en la otra esquina de Calle Prim?) y que si se destruye patrimonio histórico para llevarlo a cabo, no es trascendente pues dicho patrimonio es poco importante, lo único que demuestra es que usted no tiene, o no quiere tener, idea de Patrimonio Histórico, porque decir que un edificio como el de La Mundial no es "muy importante" es lo mismo que decir que su libro es una defecación, porque ambas afirmaciones se basan en un desconocimiento absoluto de ambas realidades.